Geocaching con niños

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Practicar geocaching con niños puede resultar muy gratificante y divertido. Sin embargo, los peques tienen su propio ritmo y forma de ver esta actividad, por lo que conviene tener en cuenta las tres cosas básicas a evitar que hace tiempo nos sugerían desde el blog de Geocaching.com titulada “The 3 Things to Avoid While Geocaching with Kids”:

1. Las prisas.

En efecto, no hay nada peor para geocachear con niños que ir con prisas. A ellos no les interesa hacer muchos cachés sino todo lo que les rodea y el paseo en si mismo (los caches también, claro!). Por eso lo más recomendable es no hacer un plan basado en completar una ruta o un determinado número de cachés e ir con calma y que sean los pequeños los que marquen en parte el ritmo de la actividad. 

2. Los Micros

A la mayoría de los niños los cachés de tamaño micro, y no digamos los nanos, suelen resultarles aburridos. Lo que más les entusiasma, además de encontrar el caché, es que sean de tamaño grande y sobre todo llenos de cachivaches para intercambiar.  A los mayores esos juguetitos, avalorios o trastos en general, nos pueden parecer “basurilla”, pero para los niños representan un auténtico tesoro. Piensalo: los piratas buscaban el tesoro por lo que había dentro del cofre, ¡el cofre les daba igual! Además, el intercambio de objetos en los cachés es una gran oportunidad para enseñarles acerca del respeto al juego y que los cachés son de todos, por lo que nunca hay que “robar” y siempre que se lleva uno algo se debe dejar otro objeto igual o mejor. Por eso, no olvidéis preparar antes de salir una bolsita con objetos que los niños deberían llevar para realizar los intercambios.

3. Controlar en exceso

Es duro para un geocacher el resistirse a buscar el caché, pero con niños son ellos los que deben hacer el descubrimiento. Se les puede ayudar un poco, poniéndoles en la dirección correcta, ¡pero sin que lo noten! Y otra cosa que les encanta es ser ellos los que busquen a su aire, con el GPS en la mano. Así que respira hondo, cédeles tu flamante GPS y que sean ellos los que busquen, con una pequeña ayuda si lo necesitan.

Por otro lado (y esto no lo mencionan en el blog que citamos), aunque se debe fomentar la espontaneidad de los niños, también conviene supervisar la actividad de forma que, sin atosigarlos, los niños aprendan conceptos básicos sobre respeto a la Naturaleza, al entorno en general y también a los propios cachés. A veces un exceso de entusiasmo o su lógica inexperiencia les hace ir “arrasando” con todo lo que se pone a su paso, sean arbustos, piedras de un muro o incluso el elaborado camuflaje de un caché.

Un último consejo: seleccionad la ruta y los cachés en función de las capacidades de los pequeños. El objetivo no es romper marcas ni superar límites, sino divertirse con ellos compartiendo una actividad ideal para familias.

Ahora ya solo queda decidir el paseo, preparar el GPS, la bolsa con objetos de intercambio y ¡salir a buscar tesoros!

¿Te faltan ideas? Te puedes pasar por el foro de GeocachingSpain. La sección "Comparte tu ruta" te puede dar algunas ideas. Por ejemplo, mira este hilo: "Recomendar para introducir niños"